¿POR QUÉ LA SOCIEDAD CIVIL (SCD) QUIERE PERSONARSE EN LAS CAUSAS PENALES DE GÜRTEL Y CAJAS DE AHORRO?

Viernes, 1 Febrero 2013 - 8:28AM

Por Mario Conde, presidente de SCD

Personarse, esto es, ejercer la acción popular en unos casos como los de Gürtel y  de Bankia y otras cajas de ahorro, ambos tramitados en Diligencias por la Audiencia Nacional, no es un plato de buen gusto. Ante todo porque implica mucho trabajo y los que estamos en Sociedad Civil y Democracia vivimos de nuestros asuntos, así que el tiempo que reclame tendremos que detraerlo de ellos o del espacio libre. En segundo término, porque estoy convencido de que es algo que no agradará al poder y que, por tanto, provocará reacciones. Pero es un riesgo que tienes que asumir. Los que llevamos en esto unos cuantos años conocemos bien como funciona el Sistema y sabemos que cuando de su subsistencia se trata, la libertad ajena no es barrera que se respete.

Creo que las noticias referidas al PP certifican que nos encontramos en la fase final de un Sistema. Ayer expresé en el Gato al Agua mi convicción de que los Sistemas no se transforman  por voluntad propia sino que se derrumban. Es mas que posible que los miembros del Gobierno no sean conscientes de la importancia del momento. Pero personalmente creo que estamos en el borde de un estallido social.Muchos me dicen que no es así, que esta sociedad aguanta todo, que no se va a levantar nunca…Pongo algunos ejemplos históricos de reacciones de estallido social y me responden que eran otros tiempos, que ahora la sociedad, la gente, está adocenada, dormida, anestesiada..Es posible, pero sigo insistiendo: creo que todo tiene un límite y por muy anestesiada que se encuentre llega un momento que los efectos de la anestesia se disipan por obra y gracia de la fortaleza del dolor, del sufrimiento, del hartazgo.

En Bankia se ventila el mayor escándalo financiero de la historia de España. ¿Ha pasado algo? Nada de momento. ¿Por qué? Por que los afectados son los dos grandes partidos, y ya sabemos que tienen “sus” jueces y fiscales. No en vano la invasión del poder judicial es un hecho indiscutible. Ya vimos que la comisión parlamentaria sobre este asunto fue un ridículo paripé. Me temo que la Justicia, a la que presionarán con todas sus fuerzas ambos partidos con alta probabilidad, no va a ofrecer un espectáculo diferente.

Porque esto es el Sistema, que no constituye una mera categoría teórica, sino una realidad incuestionable. El Sistema se integra básicamente por tres elementos: el poder político, el poder financiero y el mediático. (“EL Sistema”. 1994)  Si tenemos en cuenta que los principales medios de comunicación ya se encuentran controlados por el Sistema, comprenderemos que ya  no son verdadero poder auténticamente independiente. Así que quedan los otros dos. La pregunta es: ¿acaso todos los escándalos que vivimos no son o de clase política o de clase financiera?. Me parece evidente que es así.

En estas circunstancias, como dije ayer, no veo otra que el pacto PP/PSOE, porque como ambos se encuentran afectados de manera directa pensarán: o nos unimos o desaparecemos. ¿Que significa eso? Pues que tratarán por todos los medios que sus jueces y sus fiscales, los de ambos, se unan en el propósito común de salvar a la partitocracia actual. Dirán: los que nos atacan son anti-sistema, y la defensa del Sistema es merecedora de cualquier cosa, por Razón de Estado, que en realidad no es sino razón de clase política. De eso, insisto, me caben pocas dudas.

Por eso queremos personarnos. Para estar allí, en el seno del proceso. No vamos contra nadie en concreto. No es nuestra misión. Queremos la defensa de la sociedad. Y eso exige evitar, o por los menos intentarlo, esos posibles pactos espurios. Estando en primera linea de fuego podremos presentar escritos, conocer detalles y explicar a la sociedad, de modo directo, qué está sucediendo, qué ocurre, por qué se toman decisiones por los jueces. No conseguiremos vencer su fuerza, pero si podremos explicar de primera mano lo que sucede. Es un acto de servicio a la sociedad civil. Por eso tenemos que hacerlo. No buscamos notoriedad, a la que tendríamos derecho, sino que asumimos esa carga con el propósito de que el Sistema no consiga neutralizar la labor de la sociedad o, cuando, menos, la capacidad de entender qué sucede.

Creo que hemos llegado a un punto, como decía, en el que el estallido social puede producirse en cualquier momento. Porque la sociedad se siente engañada e impotente. Pues si conseguimos informarla de manera veraz y directa acerca de los procesos judiciales, quizás ayudemos a reducir algo esos sentimientos y a mejorar el clima social. No nos gusta la violencia. Por ello tratamos de reducir sus probabilidades.
Ahora veremos si los jueces nos admiten y qué reacciones se desatan. En eso estamos y mantendremos informada a la sociedad en todo momento